…de
cuidar la salud.
CUIDADO
CON EL GLUTAMATO.
Seguro
que muchos de nosotros hemos experimentado el hecho de que al poco tiempo de
una más o menos (generalmente más…) abundante comida en un restaurante de tipo
asiático, tenemos nuevamente hambre. Quizás incluso a la escasa hora y media,
dos horas, estamos como si no nos hubiésemos llevado al estómago esos dos rollitos de
primavera, el plato de arroz tres delicias, los tallarines con bambú y setas,
las alitas en salsa agridulce, el chop-suey de ternera, etc. Ahora sabréis el
porqué.
El
glutamato monosódico es una sal del aminoácido ácido glutámico, que está
presente en muchos alimentos, tanto de
origen vegetal como animal. Entre sus características se encuentra el ser
fuente de energía para el intestino.
El glutamato monosódico
estimula receptores específicos de la lengua produciendo un gusto esencial que
se conoce con el nombre de umami, que significa "gusto sabroso" en
japonés. 5 Estudios psicofísicos han evidenciado que el umami es un gusto
independiente de los cuatro gustos esenciales, dulce, amargo, salado y agrio.
Hoy se reconoce como el quinto gusto. (Wikipedia)
Por
estimular los receptores de la lengua, tiene un gran valor comercial para las
industrias relacionadas con la alimentación, ya que potencia el sabor de
dulces, carnes, pescados, golosinas, … Difícil es encontrar algún producto
preparado de esas características que no lo lleve.
Tan
ingente demanda llevó hace años también a una enorme producción de
sintetización industrial.
El
Doctor Robert Ho Man Kwok asoció, a finales de los 60, su consumo a síntomas
como dolores de cabeza, reacciones alérgicas, taquicardias, etc. lo que se
denominó el “SINDROME DEL RESTAURANTE CHINO”, debido al habitual uso de esa sal
en sus platos.
También
parece demostrado que desarrolla el apetito de forma “voraz” según pruebas
realizadas en laboratorio. Tal es así que en algunos casos se usa en comidas para ancianos con problemas de inapetencia.
Es fácil
por tanto sospechar que el que muchos alimentos, sobre todo los denominados “snacks”
o aperitivos, como por ejemplo bolsas de patatas fritas, lleven el glutamato
monosódico entre sus ingredientes, lejos de ser una inocente forma de que sepa
mejor, sea para crear en el consumidor ansia por seguir comiendo.
No
en vano también se señala al glutamato monosódico como una de las causas del
aumento de la obesidad. Dejar de consumirlo ayuda en las dietas de
adelgazamiento.
Excitotoxinas:
el sabor que mata. (1/4)
Excitotoxinas:
el sabor que mata. (2/4)
Excitotoxinas:
el sabor que mata. (3/4)
Excitotoxinas:
el sabor que mata. (4/4)
Si
tenéis más información al respecto dejar vuestros comentarios para los otros lectores.
Cuidaos.
Un saludo a todos.